Francia, 1789, justo antes de la Revolución Francesa. Con la ayuda de una mujer inesperada, un chef que ha sido despedido por su jefe encuentra el valor para abrir un restaurante por sí solo.
Hermosa obra francesa, lástima el subtitulado, es espantoso y hay cosas que se me perdieron pero igual vale la pena ver esta joya. Todo es exquisito, la fotografía, los paisajes, las actuaciones...
Gracias CUEVANA2 por estos regalos.
estoy de acuerdo con los comentarios sobre la fotografía, las actuaciones.
A mi también me encanta esta película.
Los gestos del cocinero.
Me conmueve la relación padre/hijo.
No me daba tanto cuenta que la "alta" cocina era solo para la nobleza,
que solo ellos eran capaces de apreciar porque es un arte dice el duque. 😮
Hoy nos indigna la idea, pero entonces era una evidencia.
El pueblo solo se alimentaba. Es lo que admitían todos.
No me acordaba que la iglesia era tan poderosa en tantas cosas!
No sabía nada sobre la organización del comercio entonces.
y veo que nada cambia: siempre nos hemos quejado sobre los impuestos ;).
Joan
at 3:00 am
Deliciosa!
Eduardo
at 5:19 pm
Hermosa obra francesa, lástima el subtitulado, es espantoso y hay cosas que se me perdieron pero igual vale la pena ver esta joya. Todo es exquisito, la fotografía, los paisajes, las actuaciones...
Gracias CUEVANA2 por estos regalos.
Gaby
at 11:20 pm
Hermosa película
juli
at 3:39 am
Magnifica obra, los inicios de la buena gastronomia francesa para todos hoy en el mundo..
veronica
at 9:10 pm
estoy de acuerdo con los comentarios sobre la fotografía, las actuaciones.
A mi también me encanta esta película.
Los gestos del cocinero.
Me conmueve la relación padre/hijo.
No me daba tanto cuenta que la "alta" cocina era solo para la nobleza,
que solo ellos eran capaces de apreciar porque es un arte dice el duque. 😮
Hoy nos indigna la idea, pero entonces era una evidencia.
El pueblo solo se alimentaba. Es lo que admitían todos.
No me acordaba que la iglesia era tan poderosa en tantas cosas!
No sabía nada sobre la organización del comercio entonces.
y veo que nada cambia: siempre nos hemos quejado sobre los impuestos ;).